¿Quién Es un Líder Pelele?
¿QUIÉN ES UN LÍDER PELELE?
El primer significado que dan los diccionarios del término pelele, es: m. “Muñeco de paja o trapo con figura humana que se hace en ocasión de algunas fiestas populares.” Generalmente la figura es de alguna persona a quien mantean (lanzan hacia arriba con una manta o sábana), para burlarse de él. “En la España de los siglos XVIII, XIX e inclusive el siglo XX era el muñeco de paja manteado por un grupo de mujeres en forma de chanza durante los carnavales en Madrid y pueblos adyacentes. El ritual del manteo se sigue repitiendo en nuestras épocas en casi todo occidente como rito de despedida (soltería, egreso, etc) o de iniciación (en una organización, en la escuela, en el ejército)”. Ésta es una característica figurada de las personas comunes o líderes que son manejadas por otras personas. Su significado figurado representa a una persona que es manejado a gusto por la gente. Lo felicita delante de él y se burla por atrás
Otro significado es: “Persona que se deja manejar por otras.” Aplicado al líder pelele es la persona que tiene a otra por encima de él, que lo controla, para que el pelele haga lo que él quiere. Cuando el controlador quiere que se trate a alguien o a una clase de subalternos, como él quiere que sean tratados. Generalmente el controlador del líder ha estado en el puesto antes, y quiere seguir controlando.
Otro significado es: “monigote, espantapájaros, títere”. Una de las funciones de los líderes peleles es asustar y hasta correr a ciertas personas del lugar donde están, porque no las quiere allí, impulsado por su controlador. Son frutos de la envidia
Otro significado: “Persona débil o de poco carácter que se deja manejar por los demás fácilmente” Los líderes peleles no tienen criterio propio por lo que escucha el de los demás. Cuando el líder controlador que está encima o al lado del líder pelele, descubre que este es débil, le es más fácil controlarlo.
Finalmente, se define como pelele a la “Persona simple e inútil.” Va con el siguiente: “Persona sin ninguna condición para enfrentar cualquier situación en la vida”. El líder pelele no logra resolver los problemas de su organización, porque es simple (no razona), los complica y crea otros problemas como consecuencia. Como el dicho: “Le sale el tiro por la culata”.
En resumen, el líder pelele no tiene criterio propio, no tiene suficiente conocimiento de las normas de la organización que “dirige”, ni conoce a la gente o los grupos a su cargo. Tiene un grupo que está a su lado, que lo apoya en sus erradas decisiones, no por falta de sabiduría, sino para ganarse su favor. En una palabra, no tiene capacidad de líder. No es un líder, es un pelele.
El carácter del controlador del líder revela su pequeñez, como tiene complejo de inferioridad, trata de demostrarse grande manejando al débil. Si tuvo y sigue teniendo envidia de otros (que es otro signo de inferioridad), procura seguir tratándolos mal, hacerles daño, interferir en sus éxitos, de forma solapada o sin reales fundamentos.
El grupo, pueblo o personas que pertenecen a la institución que “lidera” el líder pelele, está ciego, porque no conoce al “líder” que eligió, o lo sigue aceptando si otro líder mayor lo nombró. Estoy hablando en el contexto democrático, que supuestamente vivimos.
El líder controlador, ocultando su sentimiento de inferioridad, nunca podrá lograr un sentido de saludable valía, ni será feliz. Mientras que el “líder” controlado, (que también tiene complejo de inferioridad) que se siente endeudado por el que lo controla, seguirá siendo pelele del que lo controla, a menos que alguien se atreva ayudarle a crecer, o él se atreva, humildemente, pedir ayuda.
Líder, seguidor, o persona común, cuando siente problemas emocionales, temor, inseguridad, envidia, resentimiento, odio, angustia, enojo o cualquier otro sentimiento doloroso, debe, humildemente, buscar terapia emocional. Aún el terapista, en algún momento, necesita terapia; el consejero, consejería; el enfermo, médico.
Gracias a Dios, hay una Fuente sanadora, donde podremos hallar salud.